Talentos salvadoreños en riesgo de perder importantes becas

Ambos provienen de hogares de clase media baja y apelan al buen corazón de los nacionales para poder completar los costos de sus estudios

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Manuel Alejandro Mundo (izquierda) junto a Gabriel Alexander Chicas Reyes, a su salida de la Escuela de Matemáticas de la Universidad de El Salvador. Foto EDH / MARVIN RECINOS

Por Susana Joma nacional@eldiariodehoy.com

2013-06-11 8:00:00

Gabriel Alexander Chicas Reyes y Manuel Alejandro Mundo Dueñas son dos jóvenes que gracias a su excelencia académica han logrado becas para estudiar en prestigiosas instituciones extranjeras a las que no muchos jóvenes salvadoreños han tenido oportunidad de acceder , pero hoy ambos corren el riesgo de perderlas si no reúnen los fondos requeridos para completarlas.

Gabriel, quien tiene 24 años y reside en una de las colonias de Ciudad Delgado, se graduó en marzo pasado como licenciado en Matemáticas Puras de la prestigiosa Universidad de Tokio, Japón. Ese éxito lo alcanzó con una beca que le otorgó ese país amigo.

Ahora volvió a obtener una beca que gestionó cuando estaba en Japón, esta vez otorgada por el programa Erasmus Mundus ALGANT (Álgebra, Geometría y Números), que le permitiría estudiar durante dos años una maestría en dos instituciones de nivel superior de ese continente: en la Universidad de Leiden, Holanda, y en la Universidad de Burdeos, Francia.

El joven, hijo de una madre soltera que hizo su mayor esfuerzo para que estudiara en el Liceo Salvadoreño y en el Programa de Talentos, aplicó a la beca con miras a cumplir la meta que se ha trazado: convertirse en un investigador de alto nivel en el campo de la Matemática Pura.

Sus compañeros en la carrera serían asiáticos y europeos, ya que son pocos los latinoamericanos que se inclinan por esos estudios. De hecho Gabriel sostiene que en la página web del programa de becas no se reporta ningún otro salvadoreño que haya ganado esa oportunidad.

Pero la alegría de este joven se ha visto opacada por el hecho de que la nueva beca que le han concedido no es completa. Requiere $50 mil para poder cubrir su estadía en esos países donde la vida tiene un alto costo.

“Mi problema es que debido al prestigio del programa (de becas de la Unión Europea) conseguir financiamiento completo es extremadamente difícil. Afortunadamente voy a tener un descuento en la colegiatura, pero los gastos de alojamiento y de vida en general tienen que correr por mi cuenta. Entonces ante esta situación he tenido que recurrir a diversas opciones, incluyendo la misma Unión Europea, pero no he tenido respuesta”, explica.

Hoy Gabriel no sonríe mucho y sus ojos no muestran el brillo que tenían en diciembre pasado, cuando tuvimos la oportunidad de entrevistarlo sobre sus logros en la Universidad de Tokio. En esa oportunidad él visitaba el país con el fin de dictar una conferencia a los estudiantes Olímpicos del Programa de Talentos Matemáticos de la Universidad de El Salvador (UES), del cual formó parte.

De hecho él compitió en por lo menos cinco olimpiadas internacionales y cosechó varias medallas para el país.

Actualmente es instructor de otros jóvenes que se están formando a la luz de ese programa, también es profesor asistente en la carrera de Matemática de la UES.

Según explicó, ha tocado las puertas de las universidades anfitrionas, pero no ha tenido éxito porque éstas sólo conceden financiamiento a sus estudiantes activos.

Lastimosamente en la UES su solicitud tampoco ha encontrado eco, porque al igual que ocurre en todo el país no existe programa de becas enfocadas en el estudio de las Ciencias.

Ni siquiera el Programa de Becas Fantel ha podido ayudarle, ya que Gabriel ha consultado y éstos tienen descontinuado el programa de apoyo para estudios de posgrados.

De acuerdo con lo expresado por el matemático, es lamentable que el país no tenga un programa que posea la estructura para fomentar este nivel y sobre todo la formación de investigadores. Eso es algo que, según indica, está relacionado con la percepción general que hay en el país de que estudiar un posgrado es algo extra para buscar un empleo.

Dado que las pocas oportunidades de posgrados que hay en el país no se adecuan a su meta decidió recurrir a algunas organizaciones que apoyan a estudiantes destacados, pero no ha podido contactarlas.

“Llegué a la última alternativa de considerar financiar mis estudios, pero al pensar con cabeza fría me he dado cuenta de que es imposible porque mi familia es de clase media baja… y ni siquiera con préstamos podría cubrir porque la suma es demasiado elevada”, explicó Gabriel, cuya madre ahora sobrepasa los 60 años y difícilmente podría ayudarle con la pensión de vida que recibe.

Gracias a su empeño académico este compatriota que ambiciona convertirse en Investigador de Matemática Pura domina actualmente cuatro idiomas: inglés, mandarín, japonés y francés.

Sin embargo hoy lo único que le queda es recurrir a la caridad pública. Reconoce que el apoyo de los salvadoreños es la única opción que tiene para poder entrar al programa de maestrías de la Unión Europea.

“Quiero dirigirme no sólo a organizaciones públicas y privadas, sino también a ciudadanos comunes que se sientan identificados con mi causa a que por favor colaboren con una pequeña contribución”, exhortó el joven.

Gabriel dice estar consciente de que la suma de dinero es muy elevada y que puede ser poco realista que pueda conseguirla de la noche a la mañana, pero cree que poco a poco podrá cubrir una parte de esa suma para poder volver a buscar nuevas oportunidades para entrar definitivamente al programa de maestrías.

Así que quien desee apoyarlo para llegar a su meta puede comunicarse con él al correo electrónico: gachr.ebc253@gmail.com o también colaborar en forma directa a la cuenta número 003470366441 que ha abierto en el Banco Agrícola.

Esa es la cuenta que presentará con fondos suficientes ante las autoridades de Holanda para poder justificar que puede cubrir su permanencia como estudiante en esa nación.

En su reto de buscar los fondos está contra el tiempo, pues su ingreso a la maestría está fijado para septiembre de este año. Además tiene que aprovechar los posgrados rápidamente para poder entrar temprano al trabajo de investigación en su campo.

Otra lucha de superación

La angustia que atraviesa Gabriel también está afectando a Manuel Alejandro Mundo Dueñas, el joven originario de Santa Ana que en diciembre pasado nos relató que había ganado una beca para estudiar en el Instituto Tecnológico de Massachusetts, en Boston, Estados Unidos.

Manuel, quien tiene 19 años, es el único salvadoreño que ganó la beca el año pasado para empezar sus estudios de pregrado este año. También es el segundo estudiante del Programa Talentos Matemáticos que obtiene una beca en el MIT. Sin embargo, el beneficio que le ha otorgado el MIT no cubre el monto total del costo de la carrera que ronda los $60 mil al año.

La beca Fantel, que él logró por ser uno de los mejores bachilleres en la Paes, le ha dado $25 mil y el MIT $30 mil, pero le tocaría poner todavía cinco mil al año, es decir $20 mil en cuatro años, para poder completar el dinero.

El problema es que sus padres, un abogado y una maestra, no pueden ayudarle debido a que también tienen que velar por las necesidades de otros tres hijos, que aún están en edad escolar.

Inicialmente piensa estudiar ingeniería Mecánica o la Licenciatura en Matemática, pero eso tendrá que definirlo al final del primer año de estudios.

El MIT es una institución de reconocimiento mundial y el es segundo de los estudiantes del programa de Talentos en granjearse una beca de ese centro de enseñanza superior. La primera que lo logró fue la Joven Nahomy Hernández, quien en su momento también llevó una batalla para poder reunir fondos, pues la beca tampoco fue total.

“Traté de buscar ayuda de fundaciones, entre ellas la Fundación Uno, que ayuda al programa de Talentos Matemáticos, pero no tiene programas de becas. Fui a Fepade, pero me dijeron que como ya tengo una beca (de otra institución) no me pueden dar otra. Allí me dijeron que tratara de buscar padrinos u otra fundación que me ayude”, señaló el joven con un dejo de tristeza.

La búsqueda de Manuel Mundo llegó a la Embajada de Estados Unidos en nuestro país, que la vez anterior ayudaron a Nahomy. Sin embargo, en su caso sólo le dijeron que puede aplicar a la beca Opportunity que le permitiría tener cinco mil dólares para un solo año, boleto aéreo, ropa de invierno.

“Yo estoy preocupado porque el tiempo se me está terminando y para sacar la visa (para Estados Unidos) tengo que tener el dinero ($20 mil) en la cuenta, si no no me la darán. No sería de gente irme sin el dinero completo”, sostiene este santaneco, quien estudió la educación básica en la Escuela Católica Madre del Salvador y la educación media en el Liceo San Luis.

Manuel Alejandro tiene que estar el 17 de agosto en la Universidad de Massachusetts, de donde pretende acoger todos los conocimientos y experiencias necesarias que le permitan volver al país para aportar en el área de la tecnología.

En estos momentos el estudiante, quien ya tiene dominio del inglés, no sólo se ocupa de realizar las gestiones de fondos, sino que también está dando clases como instructor de los grupos de olímpicos a los que llevará a competir en la Olimpiada Centroamericana que se realizará en Nicaragua. También está preparándose, de la mano de Gabriel, para competir en la Olimpiada Internacional de Matemática que se realizará en Santa Marta, Colombia, del 21 al 28 de julio próximo. Evento previo a su traslado al MIT.

Manuel también apela a la buena voluntad de alguna organización o persona que le pueda ayudar a complementar el dinero que necesita. En su caso tiene abierta la cuenta del Banco Agrícola 03600561389 donde pueden depositar aportes. De igual forma pueden contactarlo en la dirección electrónica malejandromundo@gmail.com donde puede dar más detalles de su beca y necesidades.

Por hoy el futuro de estos jóvenes salvadoreños, que tienen la visión de aportar sus experiencias al país, está en manos de sus compatriotas, a quienes apelan con la humildad que los caracteriza.