Grecia de nuevo “en modo” de crisis

Tras el cierre de la cadena estatal de televisión, el país padeció una baja económica

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FOTO TOMADA DE LA WEB

Por Reuters

2013-06-12 8:00:00

El Gobierno de Grecia afrontaba una revuelta interna y el recrudecimiento del descontento público el miércoles por el repentino cierre de la cadena de televisión estatal ERT, horas después de haber padecido una rebaja en la calificación de su bolsa al nivel de mercado emergente.

Los problemas, combinados con el desbarajuste de un problemático programa de privatizaciones, revirtieron un aumento en la confianza de los inversores que había llevado al primer ministro Antonis Samaras a decir que el riesgo de una salida de Grecia de la zona euro había terminado y que una recuperación estaba en curso.

Los rendimientos de los bonos referenciales de Grecia a 10 años retrocedieron más de un 10 por ciento luego de que Atenas no pudo vender la empresa estatal de gas DEPA el lunes, poniendo en riesgo el cumplimiento de los objetivos del rescate.

El mercado bursátil doméstico operaba a mínimos en dos meses después de que Grecia se convirtió en la primera nación desarrollada en ser degradada al estado de mercado emergente por el proveedor de índices accionarios MSCI.

El Gobierno de Samaras no quiso hacer comentarios sobre la reclasificación de la bolsa, mientras intenta contener una creciente reacción contra el dramático cierre de ERT, que generó el descontento de periodistas, sindicatos y líderes de todo el espectro político.

La cadena fue quitada del aire horas antes de que se anunciara el cierre, descrito por el Gobierno como una medida temporaria para detener un “increíble desperdicio” de dinero de los contribuyentes antes de su relanzamiento como estación de menor tamaño.

Sindicatos laborales llamaron a un paro nacional de 24 horas para el jueves y los periodistas iniciaron una huelga indefinida, forzando un bloqueo informativo en cadenas de televisión y periódicos privados.

Algunos periodistas de ERT tomaron el edificio de la radiodifusora y transmitieron a través de Internet. Realizaron noticieros en repudio al cierre y repitieron imágenes de miles de personas reunidas afuera para protestar contra la medida.

En Atenas, la crisis de ERT opacó la reclasificación que MSCI hizo del país, cuya bolsa, según la firma, no cumplió criterios de mercados desarrollados durante dos años. Aún así, los corredores de bolsa dijeron que la maniobra podría desencadenar ingresos de fondos al mercado.

Los analistas dijeron que el descontento por el conflicto de la cadena estatal implicaba una amenaza más inmediata para el Gobierno, incluso aunque los tres canales estatales de ERT tienen una audiencia de apenas un 13 por ciento. Unos 2,000 de sus 2,600 empleados no son periodistas.

El Gobierno prometió reabrir ERT en unas semanas y justificó la repentina salida del aire por temores acerca de que los trabajadores pudieran dañar equipamiento de propiedad estatal.

“Algunos dicen que lo que estamos haciendo es indignante”, declaró Samaras. “Es nuestra obligación detener lo que está sucediendo, dejar de esconder nuestros problemas y finalmente empezar a lidiar con ellos”, agregó.

Un importante funcionario gubernamental dijo que Atenas tenía la presión de mostrar a inspectores de la Unión Europea y el Fondo Monetario Internacional que tenía un plan para despedir a 2,000 empleados estatales como exige su rescate, y que el cierre de ERT era la única opción disponible para cumplir ese objetivo.