La virgen sigue allí

La imagen de la Virgen de Guadalupe apareció en un árbol en un cantón de El Congo. Parece que el altar está abandonado, pero basta con pasar por allí para que la fe se avive

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. FOTO EDH

Por Luis Andrés Marroquín

2013-05-17 12:00:00

Católico no practicante tenía idea de haber visto en algún lugar que la imagen de la Virgen de Guadalupe se había reflejado en un sitio de El Salvador.

Por eso, cuando su acompañante le señaló que en aquel árbol que recién dejaban atrás se figuraba la virgen, detuvo la marcha, retrocedió, bajó y disfrutó de lo que veía.

Hacía menos de un año -diez meses quizás- se armó un verdadero revuelo en el cantón El Pezote, El Congo, cuando alguien descubrió que en el árbol se apareció la misma Señora que al indio Juan Diego.

La devoción guadalupana no se hizo esperar en El Pezote, llegando gente de todas partes del país y del extranjero; aunque, para estos días, el altar instalado está desolado.

El árbol está allí en un cerco que encierra un cafetal, arriba de su tronco se haya el hueco que supone es de la patrona de México.

La imagen, de lejos, en efecto da la impresión que es de la Virgen de Guadalupe, aunque de cerca eso se desvanece.

No es la primera vez que este tipo de sucesos se da en el mundo, aunque eso no significa que los devotos de la Virgen Morena dejen de celebrarlo.

“La fe y la religión se practican, se llevan en el corazón, sin alardes sin pensar en lo que diga el resto”, pensó este católico al estar enfrente del árbol. Y de la Reina.