FAO: Con estómagos vacíos no hay aprendizaje

La FAO en El Salvador ha tomado la iniciativa de empujar una ley de seguridad alimentaria.

descripción de la imagen
En Centroamérica el 40 % de la población rural padece de hambre, según indica un estudio de la FAO. foto edH / archivo

Por

2013-05-27 8:00:00

El representante de el Fondo de las Naciones Unidas para la Alimentación (FAO) en El Salvador, Alan González, aseguró ayer que la lucha contra el hambre y la pobreza, tal como se expresa en el primer Objetivo del Milenio, es una precondición para el logro de los demás objetivos. “Con estómagos vacíos no puede haber aprendizaje, igualdad de género ni desarrollo”, aseguró.

Añadió que en la sociedad actual convivir con los efectos del hambre y de la desnutrición crónica infantil es más costoso que erradicarla.

González vertió estas declaraciones durante la inauguración del “Curso de Formación para Capacitadores en Derecho a la Alimentación Adecuada-DAA” que reúne a profesionales en las áreas de nutrición, agronomía, derecho y pedagogía, entre otras.

Asimismo señaló que los esfuerzos realizados a la fecha no han sido suficientes, ya que las cifras demuestran que más del 50 % por ciento de la población rural de Latinoamérica vive bajo el índice de pobreza, con un 30 % bajo la línea de la indigencia”.

“El único número de hambrientos aceptables en el mundo debería de ser cero; sin embargo, estamos a 1,000 días del cumplimiento de los Objetivos del Desarrollo del Milenio (ODM) y seguimos con 49 millones de hambrientos, personas que sufren hambre, en América Latina y el Caribe, agregó.

Un estudio de la FAO, presentado en octubre de 2012, destacó que en Latinoamérica hay 49 millones de personas que pasan hambre, de los cuales siete millones están en los países caribeños. En Centroamérica “aproximadamente el 40 %” de la población rural padece hambre, detalló.

“Paradójicamente el mundo de hoy produce alimentos más que suficientes para proveer a toda la población, sin embargo existen muchos problemas de acceso a los mismos por estratos marginados de la sociedad, además de las pérdidas y desperdicios de los alimentos que sobrepasan las 1,300 millones de toneladas por año, lo cual constituye cerca del 50 % de la producción total de granos al nivel mundial”, apuntó.

Para la ministra de Salud, María Isabel Rodríguez, quien estuvo invitada al evento, la nutrición es la base de la salud, ya que la desnutrición y malnutrición son el cultivo de muchas enfermedades. —EDH