SANTA ANA. La alcaldía de El Congo no cuenta con un plan que permita el reordenamiento de los vendedores informales que por décadas han usurpado al menos, tres arterias de la ciudad.
Algunos vendedores consultados coincidieron en señalar que la causa principal de esta situación es que el mercado ya no da abasto para albergar a la gran cantidad de comerciantes que hay en El Congo.
Sin embargo, un recorrido hecho en el interior del mercado refleja que muchos de los locales lucen solos porque sus arrendatarios únicamente los utilizan como bodegas.
Es decir que durante el día, ellos se instalan en las calles y luego guardan su mercadería en el mercado.
El alcalde Edwin Parada, reconoció dicho problema. Aunque no se comprometió a ejecutar el proyecto, dijo que actualmente tiene pláticas con organismos internacionales para buscar ayuda económica con el fin de ampliar el actual centro de abasto.
“En el caso del mercado aún andamos gestionando ayuda. Es una posibilidad, es posible que se llegue a realizar (mejoramiento) pero no hay un cien por ciento de seguridad”, dijo el munícipe.
Uno de los argumentos que dio Parada para no ejecutar mejoras en el mercado fue el haber heredado una deuda de 150 mil dólares de la pasada administración.
Los vendedores esperan que la municipalidad logre llevarles este beneficio en un corto plazo ya que muchos negocios aledaños al mercado se encuentran a la intemperie.
“Queremos que mejore el mercado, que lo haga más grande porque ya somos muchos vendedores”, dijo la comerciante Ana Lima.
Pero a la par del mejoramiento del lugar, los mismos vendedores solicitaron que de llegarse a ampliar el mercado ya no se permita ventas en las calles. Esto con el fin de no generar competencia desleal pues muchas personas optan por comprar en las calles.