Benedicto XVI no es el primer papa que renuncia al cargo en la historia de la Iglesia Católica, el último fue Gregorio XII (1406-1415) en el siglo XV.
Según datos recopilados por agencias de noticias, el primero en dejar funciones en el Vaticano fue el papa Clemente I entre los 88 y 97, quien renunció a favor de Evaristo, porque tras ser arrestado y condenado al exilio decidió que los católicos no se quedasen sin un guía espiritual.
También en esta lista están Ponciano (230 al 235), dejó su cargo a favor del Papa Antero al haber sido enviado al exilio, mientras que el Papa Silverio (536 al 537) fue obligado a renunciar a favor del Papa Vigilio.
Benedicto IX fue otro que dejó el cargo, quien en un primer momento renunció a favor de Silvestre III y después retomó el cargo para pasarlo a Gregorio VI, quien fue acusado de haberlo adquirido ilegalmente y decidió también renunciar.
El caso más conocido fue el del papa Celestino V, quien ha pasado a la historia como el pontífice del “gran rechazo”, pues su pontificado duró del 29 de agosto al 13 de diciembre de 1294 y después se retiró a una vida de eremita. Tras su renuncia fue elegido Bonifacio VIII.
El último Papa en renunciar fue Gregorio XII, quien dejó su cargo el 4 de julio de 1415, en el marco de conflictos que provocaron que la Iglesia llegara a tener tres papas al mismo tiempo: además de Gregorio XII, el papa de Roma; Benedicto XIII, el papa de Avignon, y el llamado “antipapa” Juan XXIII.