De acuerdo a Eduardo Franco, estilista y diseñador de imagen, un tinte de cabello es el procedimiento para cambiar el color del pelo y el balayage, ombré, las degradaciones de colores y el babylights son las técnicas que están a la moda.
Si buscas algo sutil, elegante y natural elige un tinte balayage u ombré para aclarar únicamente las puntas de la cabellera.
Algunas degradaciones de colores que estas técnicas admiten son el caoba, chocolate, bronce, miel, oro, beige e incluso platino. Con esta técnica no necesitarás acomodarte el cabello para verte bien, solo déjalo como está, además el tratamiento en la sala de belleza será menos frecuente, recomienda Franco.
Pero si quieres cambiar completamente tu estilo, tíñelo con una degradación de tonos fríos como el gris, ya sea oscuro o claro. Y para un cambio menos drástico puedes elegir la técnica Babylights, son luces muy finas que van decolorando el tono del pelo.
“Los tintes no tienen restricción de edad, son accesibles, prácticos y no dañan mucho el cabello, además se pueden retocar cada dos meses o más”, asegura el estilista.